Árboles de Madrid, muchos diciendo tonterías, incluso yo
Ayer estuve comentando con unos amigos sobre la poda de los árboles en Madrid. Es curioso que sea un tema politizado como todo en esta piel de toro. Uno de mis amigos comentaba parafraseando a álguien (creo que a Arturo Pérez-Reverte, si no es él que me disculpe) que "en este país fértil en cantamañanas, que una ardilla podría recorrer saltando de tonto en tonto" y venía muy a cuento por lo de los árboles.
En Madrid recientemente hemos tenido algunos penosos accidentes relacionados con la caída de árboles o sus ramas y como aquí todo funciona a golpes, el ayuntamiento se puso manos a la obra con sesudos estudios analizando montones de árboles. Como resultado de esos estudios, se están llevando a cabo podas o talas drásticas y aquí es donde están entrando los politiqueos y los ecologistas de salón.
Si nos ponemos exquisitamente ecologistas no deberíamos cortar ni una brizna de césped y yo podría estar de acuerdo con este pensamiento extremo, pero nos encontramos en otro escenario, en el que debe imperar la razón y la sostenibilidad. Nos matamos, políticamente y para fastidiar, por defender un árbol centenario en la ciudad que ha sido mal cuidado prácticamente desde que se plantó (sí, plantó, hace muchos años pero plantado) cuando en la Sierra, sin ir más lejos hay talas de miles de ellos todos los años y se mantiene en buenas condiciones gracias a ello. Puede ser triste o no pero nuestros bosques no son naturales en su mayor parte desde hace cientos de años y nuestra labor ahora pasa por conservarlos o mejorarlos y ello incluye talas, limpieza y mil cosas más. Un ejemplo brutal de todo ello son los grandes bosques de secuoyas en Estados Unidos que tanto nos impresionan. Dichos bosques hasta la labor de los indios quemando los bosques terciarios para obtener pastos no existían como tales. Bueno, si todo eso pasa en los bosques, ¿por qué debería ser diferente en las ciudades? Si hace falta talar un árbol o mil, se talan y se sustituyen por otros, eso siempre. Lo importante es que se determine bien lo que hace falta y antes de talar se tomen todas las medidas necesarias para mantener los árboles. Lo que no es de recibo es insistir en el mismo sistema que ha permitido que nuestros árboles sean unos engendros que enferman y pueden ser peligrosos.
¿Quién hace la torta de años decidió que los árboles en Madrid se podaran así?¿Quienes son los sesudos que mantienen el sistema de poda?¿Por qué los "ecologistas de salón" no miran los árboles salvo que sea para encadenarse a ellos? Ayer, sin ir más lejos, en mi trayecto hasta el metro hice un par de fotos con el móvil de los árboles del camino, ejemplo de la mayor parte de los que hay en Madrid. No por especie, sí por poda, porque a casi todos les hacen la misma barbaridad.
Cuando no tienen hojas o como ahora, que están brotando, se observa la aberración. Cuando están repletos de hojas, parecen árboles impresionantes, gigantes de 15 metros o más. Observemos la proporción tronco-ramas. Ramas cuatro o cinco veces más largas que los troncos, poda en escoba
partiendo las monstruosas ramas del mismo punto generando una plataforma que a lo largo de los años es el sitio favorito de hongos y otras plagas y enfermedades para entrar perfectamente en el tronco. Esta poda sólo se puede entender por el tráfico rodado y para que no den las ramas en los camiones y vehículos altos y se lleva al extremo. Yo limitaría la entrada de dichos vehículos antes de hacer ésto o plantearía los árboles con mejor selección de especies y podas. Pero lo triste, es que ese tipo de poda antinatural se hace también en los parques, fuera de las calles con tráfico. No digo que haya que hacer las fusiones de ramas de árboles tan típicas que se hacen en ciudades de Castilla-León también poco naturales pero indudablemente menos peligrosas para los viandantes.
Los árboles de las fotos serían salvables, con podas drásticas de formación y un seguimiento esmerado pero ello debería venir marcado desde las políticas municipales o autonómicas con un cambio profundo en las directrices de mantenimiento de las áreas verdes. Las fotos están hechas en la Ciudad Universitaria, lo cual dice bastante poco de la política universitaria en el mantenimiento de sus zonas verdes (no sé si es dependencia del ayuntamiento, si es así sería el responsable) pero la universidad supuestamente tiene profesionales cerca (Biología, Montes, Forestales) que podrían orientar alguno de sus desvelos a que las zonas verdes universitarias sean dignas.
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